domingo, 26 de marzo de 2023

Eternidad

 


[...] la risa de los imperecederos. No tenía fin esta risa, no era más que luz y claridad, era lo que queda cuando un hombre real ha cruzado los tormentos, los vicios, los errores, las pasiones y las equivocaciones del género humano y penetra en lo eterno, en el espacio universal. Y la "eternidad" no era otra cosa que la liberación del tiempo, era en cierto modo su vuelta a la inocencia, su retransformación en espacio. 

        

El lobo estepario
Hermann Hesse

 

Los auténticos hombres

 


[...] y lo que en los colegios se llama Historia Universal, y allí hay que aprenderlo de memoria para la cultura, con todos los héroes, genios, grandes acciones y sentimientos, eso es simplemente un engaño, inventada por los maestros de escuela, para fines de ilustración y para que los niños durante los años prescritos tengan algo en qué ocuparse. Siempre ha sido así y siempre será igual, que el tiempo y el mundo, el dinero y el poder, pertenecen a los mediocres y superficiales; y a los otros, a los auténticos hombres, no les pertenece nada. Nada más que la muerte [y la eternidad]. 

[...] la fama, no. ¿Tiene ésta, acaso, algún valor? ¿Y crees tú por ventura que todos los hombres realmente verdaderos y completos han alcanzado la popularidad y son conocidos por las generaciones futuras?

[...] La fama únicamente existe de igual forma para la ilustración, solamente es un tema para los maestros de escuela. La fama no lo es, ¡oh, no! Lo es lo que yo llamo la inmortalidad. 

[...] Yo me imagino que nosotros los hombres todos, los de mayores exigencias, nosotros los de los anhelos, los de la dimensión de más, no podríamos vivir en lo absoluto si para respirar, además del aire de este mundo, no hubiese también otro aire, si además del tiempo no existiese eternidad, y ésta es el reino de lo puro. 

[...] también pertenece de la misma manera a la inmortalidad la imagen de cualquier acción noble, la fuerza de todo sentimiento puro, aun cuando nadie sepa nada de ello, ni lo vea, ni lo escriba, ni lo conserve para la posteridad. En lo eterno no hay futuro, no hay más que presente. 

        

El lobo estepario
Hermann Hesse

 

Para este mundo sencillo

 


Para este mundo sencillo de hoy, cómodo y satisfecho con tan poco, eres tú muy exigente y hambriento; el mundo te repudia, tienes para él una dimensión de más. El que hoy quiera vivir y alegrarse de su vida, no ha de ser un hombre como tú ni como yo. Quien en lugar de chinchín, exija música, en lugar de placer alegría; en lugar de dinero, alma; en vez de loca actividad, verdadero trabajo; en vez de jugueteo, pura pasión; para ése no es hogar este bonito mundo que padecemos. 

      

El lobo estepario
Hermann Hesse

 

Cuanto más te despierta la vida

 


No obstante, cuanto más te ha despertado la vida y te ha conducido hacia ti mismo, más ha ido aumentando tu miseria y tanto más profundamente te has sumido hasta el cuello en pesares, temor y desesperanza, y todo lo que tú en algún otro tiempo has conocido, amado y venerado como hermoso y santo, toda tu antigua fe en los hombres y en nuestro alto destino, no ha podido ayudarte, ha perdido su valor y se ha hecho pedazos. Tu fe ya no tenía aire para respirar. Y la asfixia es una muerte muy violenta.

      

El lobo estepario
Hermann Hesse

 

El valor indestructible de mi ser

 



[...] brotaron ante mí en esta noche bella y sutil bastantes representaciones de mi vida, llevada mucho tiempo de una forma menesterosa y nimia y sin recuerdos.

[...] Estas representaciones ㅡeran cientos, con nombres y sin ésteㅡ brotaron todas de nuevo, ascendían jóvenes y nuevas del foso de esta noche de amor, y me di cuenta de nuevo de lo que en mi pobreza hacía tiempo había olvidado, que ellas constituían la propiedad y el valor de mi existencia, que seguían viviendo invulnerables, sucesos eternizados como estrellas que había olvidado y, sin embargo, no podía destruir, cuya serie era la leyenda de mi vida y cuyo brillo astral era el valor indestructible de mi ser.

Mi existencia había sido desgarradora, errante y desdichada; conducía a negación y a renunciamiento, había sido amarga por la sal del destino de todo lo humano, pero había sido rica, altiva y señorial, hasta en la miseria una vida regia. Y aunque el poquito de camino hasta el fin la desfigurase por entero de una forma tan deplorable, la levadura de esta vida era noble, tenía clase y dignidad, no era cuestión de ochavos, era cuestión de mundos siderales.

[...] Sin embargo, aquella noche fue cuando por vez primera desde la época de mi derrota me miraba mi propia vida con los ojos inexorablemente radiantes, y volvía a reconocer a la casualidad como destino y las ruinas de vida como fragmento celestial. Mi alma respiraba de nuevo, mis ojos veían otra vez, y durante algunos instantes volví a presentir apasionadamente que no tenía más que juntar el mudo disperso de imágenes, elevar a imagen el complejo de mi personalísima vida de lobo estepario, para penetrar a mi vez en el mundo de las figuras y ser inmortal. ¿No era éste, acaso, el fin hacia el cual toda mi vida humana significaba un impulso y un ensayo?.

      

El lobo estepario
Hermann Hesse

 

2AM - I WONDER IF YOU HURT LIKE

  "Sonrío y sonrío, pero mis lágrimas fluyen nuevamente". Por:  Brenda Martínez Álvarez (K-POP y más)